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martes, 6 de julio de 2010

Liturgia Penitencial

RENOVACION DEL SACRAMENTO DEL BAUTISMO




Introducción.

Como culminación de esta primera parte del Curso de Evangelización, como renovación del Bautismo, se celebra una Liturgia penitencial, con el esquema de una Liturgia de la Palabra, donde se expresan los diversos aspectos de la conversión y la fe como aceptación de Jesús como Salvador. Es el primer momento importante del curso de evangelización.

Para llevar esta Liturgia se sigue el siguiente esquema:

o Introducción y cantos penitenciales
o Palabra de Dios: lecturas de contenido penitencial, en las que se encuentre una invitación a la conversión.
o Homilía, ubicando el sentido y el propósito.
o Expresión de los diversos aspectos de la conversión.
o Confesión de pecado
o Perdón de resentimientos Renuncia a Satanás
o Expresión de la respuesta de fe:
o Oración del Padre nuestro
o Oración para recibir a Jesús
o Como respuesta sacramental:
o Oración de liberación
o Absolución sacramental
o Cantos de alabanza y acción de gracias

(Antes de la Liturgia Penitencial o en los días inmediatos a ella, se invitará a las personas a que hagan una confesión sacramental personal).

Liturgia Penitencial



1.- Confesión de pecado

A cada frase repitamos: Perdón, Señor, perdón.

• Por no amarte con el ser entero y sobre todas las cosas.
• Por no tenerte como centro y Señor de mi vida.
• Por tener ídolos que sustituyen tu lugar y tu acción.
• Por no leer ni meditar diariamente tu Palabra.
• Por no actuar en tu presencia, con atención amorosa a Ti.
• Por no apartarme diariamente para orar.
• Por no participar frecuentemente en la Eucaristía.
• Por buscar conocimiento y poder en fuentes contrarias a Ti.
• Por utilizar tu Nombre en cosas contrarias a tu voluntad.
• Por no dar buen testimonio de Ti a los demás.
• Por no testificar de tu presencia en toda oportunidad.
• Por no estar comprometido en la misión evangelizadora.
• Por la falta de amor, entrega y servicio a mis hermanos.
• Por mantener resentimientos y rencores, y no ser capaz de perdonar.
• Por juzgar y hablar mal de los demás.
• Por cualquier ofensa, injusticia y daño a los demás.
• Por toda mentira, engaño, difamación y calumnia.
• Por las envidias, celos y discordias.
• Por toda codicia, afán de poseer más.
• Por todo robo o daño a los bienes del otro.
• Por no restituir o restaurar los daños causados.
• Por todo afán desordenado de lucro, de poder o de placer.
• Por toda impureza, sensualidad, fornicación y adulterio.
• Por no disciplinarme ante los estímulos sexuales y eróticos.
• Por ser causa consciente de tentación para los demás.
• Por todo desorden en la comida y en las bebidas.
• Por utilizar o promover drogas.
• Por no vivir el matrimonio de acuerdo a tu voluntad.
• Por no cumplir con una paternidad responsable.
• Por no cumplir debidamente los deberes cívicos.
• Por toda omisión culpable en la promoción de la justicia.
• Por no preocuparme y no hacer nada a favor de los pobres.
• Por no ser miembro vivo y activo en mi parroquia.
• Por no pertenecer y no participar responsablemente en ella.
• Por no vivir con entrega generosa mi vocación y misión eclesial.

Reconozcamos no sólo los actos sino sobre todo las situaciones estables y mantenidas voluntariamente.

2.- Expresión de fe

Vamos a manifestar nuestra fe en Dios y su obra salvífica a través de Jesucristo. Signos externos: Levantar la mano derecha, una vela en la mano, de pie, en voz alta, etc. Se responde: Sí, yo creo.

• ¿Crees que Dios te creo por amor y te ama como Padre?
• ¿Crees que El está presente en el mundo y lo transforma?
• ¿Crees que El ama a todos los hombres, especialmente a los pobres y a los pecadores?
• ¿Crees que El tiene un plan de felicidad, paz y justicia para todos los hombres?
• ¿Crees que el bien siempre triunfará sobre el mal?
• ¿Crees que todos los hombres y mujeres somos hijos del mismo Padre?
• ¿Crees que tanto amo Dios al mundo que le envió a su hijo único, no para condenarlo sino para salvarlo?
• ¿Crees que Jesús, Hijo Único de Dios, y único mediador entre Dios y los hombres, es capaz de salvar al mundo?
• ¿Crees que en su muerte en la cruz, murió también el pecado?
• ¿Crees que resucitó y está vivo para siempre?
• ¿Crees que tiene todo el poder en el cielo y en la tierra?
• ¿Crees que Jesús es la única respuesta y solución efectiva para los problemas del mundo?
• ¿Crees que hoy y aquí Jesús puede dar sentido a tu vida?
• ¿Crees en el Espíritu Santo fuente de Vida Nueva?
• ¿Crees que el Espíritu Santo todo lo transforma y santifica?
• ¿Crees que dirige a los creyentes y se hace presente en el amor?
• ¿Crees en la unidad y santidad del cuerpo de Cristo?
• ¿Crees que la madre de Jesús es también nuestra madre?
• ¿Crees que todo concurre para bien de los que aman a DIOS?
• ¿Crees que todo lo que haces a un hermano necesitado lo haces también a Jesús?
• ¿Crees que un día participarás de la resurrección de Jesús?
• ¿Crees que Jesús regresará triunfante a la tierra?

3.- Renuncia a Satanás y sus obras.

Así pues la verdadera y total dependencia de Dios, nos obliga a renunciar a todo aquello que nos ha encadenado al pecado, repitiéndonos formalmente nunca más volver a El. De pie se responde: Sí renuncio.

• ¿Renuncias a Satanás?
• ¿A todas sus obras y seducciones?
• ¿Al ocultismo, esoterismo y toda superstición?
• ¿A querer conocer el futuro al margen de Dios?
• ¿A la magia, curanderismo y hechicería?
• ¿A la lectura de las cartas, del café, del té y de la mano?
• ¿Al espiritismo y toda invocación de los muertos?
• ¿A la astrología, al zodiaco, a los horóscopos?
• ¿A adquirir poder y control sobre ti y los demás al margen de Dios?
• ¿Al control mental y a la dianética?
• ¿Al uso de amuletos, fetiches y talismanes?
• ¿Renuncias a filosofías contrarias al cristianismo?
• ¿Renuncias a la Nueva Era de Acuario también llamada New Age?
• ¿Renuncias completamente y para siempre a todo esto?
• ¿Renuncias también en nombre de tus antepasados?
• ¿Renuncias a todo egoísmo, lujuria y maldad?
• ¿A toda autosuficiencia, codicia y ambición?
• ¿A todo orgullo, soberbia y vanidad?
• ¿Renuncias a odios, rencores, celos y resentimientos?

4.- Oración para aceptar a Jesús como tu Salvador Personal

Ven, Señor Jesús. Te necesito. Te abro la puerta de mi corazón y de mi vida; te acepto personalmente como mi Salvador. Concédeme experimentar tu amor, tu salvación, tu liberación; dame tu vida en abundancia. Límpiame, purifícame, renuévame, transfórmame. Entra en mi corazón y en mi vida y llénala de ti. Haz de mí lo que quieres que yo sea. Protégeme y guárdame.

María, madre del Señor y madre mía, llévame a Jesús y enséñame a ser su fiel discípulo. Amén.

8.- Proclamación del Señorío de Jesús

Los que quieran rendir a Jesús todos los aspectos de su vida responden: Jesús es mi Señor.

• De mi familia y amistades
• De mi pasado, presente y futuro.
• De mis estudios o trabajo.
• De mi salud y enfermedad.
• De mi pobreza y riqueza.
• De mis amigos y conocidos.
• De mi cuerpo y de mi alma.
• De todas mis relaciones personales.
• De mi sexualidad y emotividad.
• De mi patria y de mi hogar.
• De mi casa y de mis bienes materiales.
• De mis esperanzas y temores.
• De mi vida cívica, política y social.
• De mi imaginación y memoria.
• De mi inteligencia y voluntad.
• De mis ojos y oídos, manos y pies.
• De mi manera de divertirme.
• De mi manera de comer, de vestir, de pensar y de hablar.

Las siguientes oraciones son opcionales de acuerdo a las necesidades de la comunidad, los objetivos del curso y el criterio del sacerdote asesor, pero hacen la experiencia espiritual de la liturgia penitencial más completa y fructífera.

5.- Sanación de los sentidos

Harán la señal de la cruz en el lugar que se vaya indicando con el dedo pulgar.

6.- Perdón de resentimientos

(Sanación interior)

7.- Oración de liberación.

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